domingo, 25 de enero de 2015

Anciano silbador...

Iba yo ayer, a eso de las nueve de la tarde,  camino de mi casa. Como es habitual, me crucé con distinta gente, nada fuera de lo normal. Pero hubo un gesto de una persona, un gesto muy habitual, que me llamó la atención y me dio que pensar. Era una persona mayor, de unos ochenta años. Iba en dirección contraria, bien estirado, con las manos cogidas tras la espalda, caminaba tranquilamente. Iba silbando.
Esto fue lo que me llamó la atención, no su forma de colocar los labios, ni la canción que interpretaba. Es bastante común ver a un anciano silbando por la calle, o tarareando un ritmo aleatorio, pero alguna vez te has preguntado, querido lector, por qué silba ese anciano.
Un silbido, en una persona mayor, en una persona que ha vivido mucho y le queda poco por vivir, es señal de tranquilidad, es señal de alegría, es señal de paz, es señal de orgullo. Es señal de que es una persona que, a pesar de lo que le haya podido ocurrir o lo que haya podido hacer, está satisfecho de la vida que ha tenido, de los actos  buenos que ha realizado y el bien que ha hecho en su familia, con sus amigos o en su ambiente habitual. Es una persona que sabe que le queda poco, pero que no tiene miedo, porque está preparada. Y todo esto lo demuestra de una forma muy simple: silbando.
Por eso, admiro a los ancianos que silban y espero que, en un futuro lejano, pueda yo también ponerme a silbar. Porque, en mi opinión, anciano silbador, orgulloso está de su labor.

domingo, 14 de diciembre de 2014

Los perfiles del perfil

- Oye, me alegro de verte. Seguiremos en contacto.
- Estupendo, tienes mi móvil?
-Eh... creo que no.
- Apunta, 699 29 82 74
-muy bien, ¡nos vemos!

Comúnmente se repite esta situación en nuestras vidas. Hoy en día, la gente enterada, la gente actualizada, la gente adaptada, es decir, la gente cotilla, cuando apunta un nuevo contacto en su teléfono, muchas veces, lo primero que hace, es mirar su perfil de Whatsapp. He de reconocer que yo me incluyo dentro de este grupo, pero es por una buena razón.
Cuando conoces a una persona, rápidamente preguntas a amigos comunes sobre su personalidad, sobre sus gustos, sobre sus tendencias o sus formas de pensar. Esta actitud, única y exclusivamente humana, se ha visto facilitada en los últimos años gracias a la informática, y más especialmente al Whatsapp. A día de hoy, se puede decir que el perfil de Whatsapp es el espejo del alma. 
Para aquellas personas que se niegan a entrar en el universo del teléfono blanco dentro de un bocadillo verde, quisiera recomendarles que, a no ser que tengan un argumento convincente, entren en el mundillo. No me pagan por decirlo, pero el Whatsapp es uno de los grandes inventos de este siglo. El inventor de esta aplicación ha conseguido crear la mayor red de información instantánea de todos los tiempos, un gran logro, enhorabuena. (aunque hay que decir que, como casi todo, el "wasap" tienen un gran riesgo de adicción)
Pues bien, como decía, el perfil consta de dos elementos fundamentales: la foto y la frase de estado. Yo no soy psicólogo, pero me gusta elaborar mis propias teorías. Hay muchas tipos de personas. Quien no tiene foto, muchas veces es por pura simplicidad, es gente sencilla, tal vez un poco desconfiada. Quien en vez de tener una foto suya, tiene una foto de un paisaje o algún elemento de la naturaleza (véase flor, fruta, árbol), suele ser gente sensible, gente detallista, gente que produce paz y tranquilidad. Quien tiene una foto de su familia, es gente agradable, gente entregada y gente satisfecha y agradecida. Quien tiene un escudo, o la foto de un jugador, o de un actor, o de un líder religioso o ideológico, es gente apasionada, gente que disfruta de la vida e incluso gente que se propone metas altas. Quien tiene una foto en la que aparece junto a un famoso o junto a un líder político, es gente orgullosa, gente presumida, gente sin prejuicios.
Podríamos continuar durante horas, pero no es necesario. Si quieres comprueba esta teoría, ya verás como en muchas ocasiones se demuestra. Como decía al principio, en mi opinión, el perfil es el espejo del alma, es lo que, a veces sin quererlo, muestra a los demás aspectos muy concretos de nuestra personalidad.

sábado, 8 de noviembre de 2014

El sonido del recuerdo

Dícese y oyese que, hoy en día, la gente joven puede pasar largas horas escuchando música. Hay muchas teorías u opiniones al respecto. Hay quien piensa que esto se debe a que esta juventud hemos nacido en un mundo acostumbrado al ruido allí donde se vaya, y escuchar el silencio incomoda o provoca náuseas. Otros dicen que necesitamos la musica porque somos incapaces de pensar por nosotros mismos, y poder escuchar a Pitbull decir: "que no pare la fiesta" nos sirve de gran ayuda para tomar importantes decisiones.
Pero el sentido o la finalidad de la música va más allá. Para algunas personas mayores, esta teoría sacada de mi bolsillo puede ser difícil e incluso imposible de entender. Las opiniones que he expuesto al principio de la entrada, son, en muchas ocasiones, ciertas. Pero no solo le ocurre a la gente joven, pues mucha gente adulta, mientras realiza acciones cotidianas, instintivamente  tararea o canturrea el ritmo de una canción (hay quien incluso acompaña su íntimo concierto dando golpecitos  con los dedos en una mesa).
Seguro que te ha ocurrido, querido lector, que estando en un supermercado o con la radio del coche encendida o caminando por la calle, oyes una canción que te llama la atención. Seguramente al resto de seres humanos que tengas a tu alrededor les será indiferente, pero a ti te emociona. Al oír esa canción te recuerda a un momento de tu vida o a un hecho concreto que, no se sabe bien por qué, tu cerebro quiso archivar y quedó olvidado en algún lugar de tu cabeza. Puede hacerte sonreír o hacerte llorar. 
En mi opinión, estos momentos (a los que me gusta llamarles brain's voice) son una prueba de que toda nuestra vida va acompañada de una melodía. No siempre es la misma, pues depende de nuestra situación o nuestro estado de ánimo, pero siempre nos resulta muy agradable. Hay quien utiliza la musica como un simple medio placentero, pero en realidad, la música es la voz de nuestro cerebro, su forma de expresarse y de hacernos ver las cosas.

jueves, 10 de julio de 2014

Y corriendo se acostó para que el apuesto príncipe pudiera al fin vencer al temible dragón.

miércoles, 29 de enero de 2014

El olor de la tristeza

Nueve de la tarde, con las últimas fuerzas del día consigues arrastrar tu cuerpo hasta el portal de casa. Con un movimiento rápido metes tu mano en el bolsillo del pantalón y sacas las llaves de casa. Mientras sujetas el manojo vas buscando la clave indicada que introducirás en la cerradura para así, al fin, abrir la puerta que te resguardará del frío que inunda la ciudad cuando el sol termina su turno. Caminas lentamente hacia esa máquina que tantas veces te ha salvado la vida, el ascensor. Solo de verlo se te dibuja una sonrisa en la cara, pero a medida que te acercas hacia tu gran amigo, te das cuenta de que hay algo en él que no cuadra. Hay algo que no estaba esta mañana, ni ayer. Una sensación de agobio y opresión te invade rápidamente. Te temes lo peor. Cuando por fin estás a un palmo de la puerta metálica confirmas tus sospechas. Es un folio sujeto a la pared con una tira de celo, y con la tan odiada letra del conserje está escrito: ASCENSOR AVERIADO. POR FAVOR, DISCULPEN LAS MOLESTIAS.
Coges fuertemente la barandilla y comienzas a subir las escaleras con una enorme tristeza, pero sin perder la dignidad. A medida que te vas acercando hacia el primer piso, tu olfato de roedor detecta un agradable aroma a bacon y huevos fritos. Solo de pensar en la sensación de mojar el pan tierno en la yema, se te hace la boca agua.
Sigues subiendo, tal vez con una sensación diferente. El agradable perfume se esfuma lentamente pero, antes de que desaparezca, por completo aparece otro olor tan gratificante: el olor a bizcocho recién hecho. Te imaginas partiendo lentamente con las manos el esponjoso bollo, mientras un hilo de vapor caliente sale de su interior empapando de paz y tranquilidad todos los rincones de la casa .
Ahora te sientes totalmente calmado. Subes las escaleras casi levitando, pero una tercera fragancia te hace poner los pies en el suelo. Reconoces ese olor, intentas subir más rápido para no tener que olerlo. Es inútil, ya has llegado al tercero. Muy asustado abres la puerta de casa. Te diriges hacia la cocina y ves a tu padre haciendo los bocadillos.
- Hola papá
- Hola, ¿qué tal?
- Muy bien. ¿Qué... hay... para cenar?
-Acelgas.

martes, 17 de diciembre de 2013

Carta de Navidad

20 dic 2013
Querida mamá:
¿Cómo estáis?,¿qué tal en la vieja granja? ¡Cómo me gustaría estar ahora con vosotros! Mientras escribo estas palabras me vienen a la cabeza grandes recuerdos de la infancia: jugando en el campo con mis hermanos, escuchando a las tías hablar sin parar, las excursiones con papá para ir a buscar gusanos... Espero que esteís muy bien.
Me gustaría poder decir que estaré con vosotros  pronto, pero me temo que os estaría mintiendo. Ayer  vinieron a buscarnos. Todo ocurrió muy rápido. Estábamos un grupo de amigos tomando algo cuando entraron por la puerta tres tipos altos y grandes. Todos empezamos a correr pero al cabo de unos minutos ya nos habían subido al camión. Estábamos muy asustados. Ahora nos tienen encerrados en una gran sala oscura, nos dan de comer por la mañana y con eso sobrevivimos el resto de la jornada.
No sé cómo acabará todo esto. Un amigo me ha dicho que nos matarán a todos por Navidad. Me temo lo peor.
Si te llega esta carta de despedida, es gracias a un amigo que tiene un contacto.
Quisiera haberte enviado algo de ayuda, pero al llegar nos lo quitaron todo. Dale un gran eso a los hermanos y otro muy grande para ti.

Te quiero. Feliz Navidad.

Señor Pavo Jr. 

domingo, 27 de octubre de 2013

¡Eh, tú! artista

Para que nuestra cabeza esté sana y nuestra mente funcione es necesario que siempre tengamos una inquietud, una duda o un problema que nos haga reflexionar. No siempre han de ser problemas existenciales, sino pequeñas cuestiones, que, a raíz de un suceso cotidiano ha provocado desviar la mente de nuestras ocupaciones.
Mientras escribo estas palabras me estoy dando cuenta de que no es el principio más acertado en relación con el tema en el que quiero hacer hincapié, pero ya que he empezado de este modo voy a dejarlo así.
Anoche estuve viendo una película, August Rush. Narra la historia de un niño que, sin haber tocado un instrumento en su vida, es un prodigio musical. Poco después de que terminara, una de esas cuestiones tan discutidas asaltó mi mente:¿el artista nace o se crea?.
Mucha gente considera que un artista nace siendo artista, y otras muchas que un artista se crea a través de la experiencia. 
En mi opinión todo el mundo nace siendo artista. Nacemos con la capacidad de poder llegar a dominar un arte. ¿Y porqué hay tan pocos artistas? Por dos razones:
  1. La gente no lo sabe.
  2. La gente no se lo cree.
Todos somos capaces de hacer cosas grandes, pero muchas veces no las hacemos. Por eso te propongo, querido lector, que luches por buscar aquello en lo que puedes triunfar y que creas en ti mismo, que creas en que de verdad tienes un don.
Y como lo bueno, si breve, dos veces bueno, no digo más.